2 de diciembre de 2014

La máquina del tiempo



    Habíamos estado viendo una película sobre los viajes en el tiempo. No sé cómo sucedió pero nada más terminar de verla, Pablo hizo sus elucubraciones sobre las posibilidades de esas incursiones a través de lo imposible, y me preguntó muy convencido,  que si nosotros podríamos construir un artefacto para tales logros. Totalmente seguro de mi respuesta afirmativa, me dijo entonces que si nos poníamos a ello este próximo viernes...



   Ya lo había intentando más o menos con su edad, y entonces conseguí una nave espacial con la que viajaba a los planetas conocidos y por conocer, nunca antes pisados por el hombre: ahí estaba yo con mi nave. Apretando simples botones. 
   Más madurito, y bastantes años después lo intenté de nuevo con esa otra máquina que me ha traído hasta aquí. 
   No sé si esto es el futuro, o el pasado pues el tiempo mismo lo dirá; la nave y su reloj programado, no recuerdo dónde quedó aparcada...


Fotografía y texto, Rafa Ordóñez